Congelándome

Sin saber que pasa aquí.
Sin entender porque a veces quiero tenerte tan cerca.
A ti, “corazón loco”,
Que al dejar todo tan librado al azar,
a la fluidez,
a la levedad,
vas perdiéndome, congelándome.
Me rehusó a conformarme con lo vivido.
Tanta piel no puede agotarse,
tantos deseos no pueden apagarse
solo porque tardamos demasiado.
Me obligo a pensar que quizás nuestro momento no sea el presente,
Que algo mas nos espera a la vuelta de ese camino.
Quizás mañana o pasado
vengas a cumplir por fin esas promesas de noches inolvidables.
Pero que mas da…
Hoy brindare por lo que pudimos ser,
Por lo que no me hiciste sentir.
Y buscare otras manos que me desvistan lentamente
Que derritan este hielo,
Que me vayan despidiendo de ti.
Sin prolongar mas el final que me has anunciado

tan en silencio.

Mis recuerdos... hasta tu orilla!

Hoy me puse a pensar (como tantos otros días)
en tu boca de café,
esa q me dejo el sabor medio dulce y medio amargo en la despedida…
No logro entender que hiciste en mi
Como pudiste descifrarme en tan pocas horas,
conocerme casi sin hablar,
darme respuestas que tenia sin poder encontrar.
Me diste una extraña confianza,
y muchas cosas cambiaron dentro de mi…
será por eso que me llevaste contigo hasta tu orilla…
y que aun una parte mia esta junto a ti.
Sigo maldiciendo el cansancio
Y el tiempo que tan mal nos trató,
corría cada segundo mas rápido,
no dejando que mis travesuras y tu dulzura pudieran latir…
haciendo que el final que tanto tratamos de postergar
se acercara inevitablemente.
Quizas asi haya sido mejor...
Porque hoy nos queda
el recuerdo de dos desconocidos
de sabores de labios encontrados
de acentos de voces lejanas
de palabras nuevas
y melodías de una guitarra distorsionada
y la ilusion,
el anhelo
y la certidumbre
de que algun dia el reencuentro llegará!...

(Para ti... siempre estas presente)