Me he cansado de criticar una y otra vez a la vorágine con la que vive la gente. El ver que corren de un lado para otro, sin detenerse a mirar ese detalle que no estaba ayer, o que ya no esta hoy, sin detenerse a pensar en lo que tienen ganas de hacer o simplemente para no pensar en nada.
Inevitablemente me he encontrado envuelta en ese traqueteo, haciendo lo que tengo que hacer, cumpliendo horarios, y siempre con el pensamiento un paso adelante para que no se escape nada, porque hay que cubrir todos los frentes, y cada minuto que pierdo me puede alejar de los objetivos…
Guau! Cuanta madurez junta!... si de eso se trata ser responsable donde puedo renunciar?
Por primera vez los nervios y el nudo en la boca del estomago cerraron mi apetito… y tengo el sueño incrustado en mis ojos como palillos que me lastiman y pesan.
Lo que mas dolió fue cuando el cansancio me ataco directo a lo mas profundo de viejos deseos aun no cumplidos, heridas abiertas que aun secas se hacen notar.
Por suerte hubo algo que me saco de ese transe desgastador y autodestructivo: sus letras, sus presencias, y el sentir nuevamente que la vida se puede disfrutar con una sola canción y una mano amiga tendida.
Fue una noche seductora, que me invito a vivir lo que extrañaba, a sentir lo que el cuerpo me pedía, dejando de lado las preocupaciones y llenándome de pleno disfrute.
Siendo honesta había escuchado ya a Fran Fernandez pero me gusto muchisimo mas el descubrirlo a fondo en una presentación en vivo, conociendo las historias que envuelven a cada canción, y respirando desde cerca su voz.
Fue un poco loco porque estuve 24 hs sin dormir para que todo salga lo mejor posible y para poder cumplir con todo, pero al fin de cuentas estando ya sola me sentí en paz, contenta, y con la tranquilidad que tanto extrañaba.
Así, el mejor pensamiento cruzo mi cabeza “volví a mi”.
Solo uno sabe que lo salva, esas pequeñas cosas que te reconcilian no solo con el mundo, sino que con vos mismo.
Es por esto que le agradezco a Fran por brindarse de la manera que lo hizo, por regalarnos parte de él, por traerme esos abrazos de algunas re-locas de la otra orilla (porque nos acerca!!!!) y por ser el mensajero de mucha mas música enviada de regalo desde allá.
Y todo esto sin “la mano amiga” es imposible, por eso desde el sur y a mi lado están siempre para compartir/se… ; )
Ahora vuelvo a estar entera para seguir lidiando con la rutina, y estoy con la sonrisa dibujada en la cara porque también hoy vuelvo a escribir después de mucho tiempo, aunque sea para contar esto.
Les dejo esta canción que es de esas que te producen cosquillas en la panza porque te vulneran, y te exponen...
